Algunas características
de la hipnosis ericksoniana
La hipnosis tradicional está llena de lo que mejor se puede describir como nociones simplistas de cómo funcionan el inconsciente y la hipnosis. Muchas de estas nociones pueden limitar el alcance y la gama de opciones que tenemos y establecer direcciones que no son necesariamente útiles ni para nosotros ni para nuestros clientes.
"La hipnosis es parecido al sueño" no encaja con nuestras experiencias cotidianas de trance en vigilia; "nuestro inconsciente nos protege plenamente" está totalmente reñido con saber que las personas tienen problemas – de hecho, si el inconsciente fuese tan omnipotente ¡no habría clientes! Los procesos inconscientes evidentemente son muy potentes pero si hemos de aprovecharlos al máximo, necesitamos ir más allá de muchas de las ideas necias, limitantes y, en potencia peligrosas que se encuentran por doquier en este campo.
Es más útil considerar el inconsciente como desarrollándose mediante el aprendizaje y el hábito. Evidentemente, podemos aprender malos hábitos y el inconsciente también puede cometer errores. Usar la hipnosis y trabajar con el procesamiento consciente e inconsciente puede ser muy importante para el cambio profundo y duradero.
Algunas características de la hipnosis ericksoniana
La hipnosis es naturalística. En contra de los mitos tradicionales de la hipnosis, el enfoque ericksoniano es 'naturalístico', es decir, en nuestra vida cotidiana utilizamos habilidades hipnóticas a la hora de afrontar las dificultades o desafíos vitales.
Aprendizaje y generatividad. La hipnosis se aprende como cualquier otra habilidad. No es tan imporante el tránsito a la mente inconsciente (el trance) como el trabajo de colaborar con el otro para que sea capaz de generar sus propias estrategias para alcanzar sus propias soluciones. Las sugestiones de otros tipos de enfoque dan ya soluciones genéricas y poco flexibles; o simplemente esperan que sin intervención directiva el sujeto encuentre una solución.
Habilidades hipnóticas. El acceso a la mente inconsciente lo realiza Erickson utilizando los procesos hipnóticos naturales que utilizamos habitualmente y mejorando estas habilidades enseñándolas. Todos los fenómenos hipnóticos son reproducciones o amplificaciones de cosas que ya somos capaces de hacer. Por ejemplo, la capacidad de olvidar cosas, la de no ver lo que está delante de nosotros, o la de no sentir dolor ante un golpe fuerte.
Autogestión y autodesarrollo. El modelo mental y vital de Erickson se sitúa en un planteamiento de autogestión y autodesarrollo. Se centra en cómo cada persona nos adaptamos de la forma más realista y actual posible a los desafíos vitales que se nos presentan en la vida cotidiana, haciéndonos responsables de nuestra propia vida.Este carácter innovador del trabajo de Milton Erickson a veces se ha estereotipado uniéndose a la tradición ritualística de la hipnosis clásica y de otros modelos de intervención para el cambio. La complejidad del modelo ericksoniano consiste en que resuelve la dialéctica entre enfoque directivo y no directivo inclinándose por un modelo directivo que promueve la no-directividad, es decir, la libertad y el poder personal de todo ser humano